Tener un cultivo de marihuana en casa no siempre tiene por qué implicar un enorme desembolso en material. El grado de profesionalidad con el que decidas sacar adelante tus cultivos dependerá de muchos factores, entre ellos el espacio de que dispongas, tu experiencia previa como grower y obviamente el presupuesto que estés dispuesto a invertir en este hobby.
Tabla de contenidos
La afición al cultivo conlleva algunas exigencias
Al igual que sucede con el resto de aficiones, hay una serie de requisitos de los que no podrás prescindir si te decides a cultivar tu propia marihuana en casa. A nadie se le ocurre ponerse a montar maquetas sin contar con las herramientas adecuadas para ir ensamblando las piezas, ¿verdad? Con las plantas de marihuana sucede exactamente lo mismo. Si quieres que tu cultivo llegue a buen puerto, aunque se trate de una única maceta, vas a tener que invertir algo de tiempo y dinero en una serie de productos imprescindibles.
Por otro lado, la marihuana es un tipo de planta muy exigente y es normal que con frecuencia tengas que estar corrigiendo aspectos de su cultivo tales como la luz, la humedad o la temperatura en el caso de que estés practicando un cultivo de interior, y otros como el pH del sustrato, el agua o el uso de fertilizantes, algo común en todo tipo de cultivos, aunque vivas en un paraíso de clima tropical y con las condiciones más propicias para cultivar tu hierba al aire libre.
En cualquier caso, en este post nos vamos a centrar en algo muy concreto. Dejaremos para otro momento todos esos accesorios con los que podrías montarte un cultivo súper profesional y e iremos directamente a la esencia. A lo más básico para hacer crecer una planta de marihuana en una maceta y con sustrato de tierra. Para convertirse en un cannabicultor de la liga profesional antes hay que tenerse la lección bien aprendida desde lo más básico.
En nuestro grow disponemos de los productos orgánicos de BioCanna
Top 5 de productos esenciales para el cultivo básico de marihuana
¿Recuerdas cuando en el colegio te hacían germinar semillas de lenteja en botes de yogur? Pues vamos a ponernos en ese plan y vamos a empezar con lo elemental para ir añadiendo a tu cultivo de marihuana 5 productos esenciales para su correcta evolución en cada una de sus fases.
Estimulantes para las raíces
Al igual que una casa se empieza por los cimientos, el éxito de una planta de marihuana empieza por un sistema radicular bien construido. Trabajar bien el desarrollo de las raíces es una obligación que el grower debe asumir desde las primeras semanas de cultivo. Pero como es algo que no está a la vista, muchas veces se nos escapa.
Resulta que la marihuana no es precisamente una de las plantas más activas en lo que a expansión de sus raíces se refiere, por lo que va a necesitar una pequeña ayuda si quieres que éstas crezcan rápido y en cantidad, proporcionándole a la planta una buena base para su alimentación y para su estabilidad cuando empiece a crecer en vertical.
¿Cómo podemos conseguirlo? Mediante el uso de productos estimulantes. Estos se añaden al agua de riego durante la primera fase del cultivo, y aunque se puede prolongar su uso durante el crecimiento de la planta cuando más efectivos resultan en durante las 2-3 primeras semanas o en los trasplantes. Aquí se puede comprar el estimulante para raíces de Canna
Abono de crecimiento
En la fase de crecimiento la alimentación de una planta de marihuana requiere de un importante aporte de nitrógeno. El nitrógeno favorece al desarrollo de las células y en consecuencia hace que las plantas se desarrollen de forma más rápida y vigorosa. ¿Y dónde está el nitrógeno que necesitan las plantas para su desarrollo? Pues básicamente se encuentra en la combinación de determinados aminoácidos y proteínas presentes en los abonos para la tierra de cultivo, enriquecidos también con fósforo y potasio.
Cuando la planta tiene ya entre 3 y 5 semanas de vida se empieza a añadir en el agua de riego este tipo de productos y su uso se extiende durante todo el período de crecimiento. Por supuesto, debes prestar mucha atención a cómo va respondiendo tu cultivo para no sobrealimentarlo y no debes caer en el error de pensar que por echar más abono tu planta va a crecer más porque lo más probable es que termines elevando tanto el pH de la tierra que acabes con ella. Aquí podemos comprar abonos de crecimiento
Abono de floración
Se distingue del tipo de abono anterior en que este está específicamente destinado al período de floración de la planta y, por lo tanto, presenta unas particularidades específicas.
Durante el ciclo de floración se forman los cogollos de marihuana a lo largo de las ramas de la planta y de su punta central. Lo que interesa en este momento es que estos cogollos encuentren su espacio en el conjunto del cultivo, sean capaces de concentrar mucha resina (que sean jugosos) y que las flores sean duras. Para lograr todo esto se aplican los abonos de floración correspondientes, también con un alto contenido en fósforo y potasio, hasta unos 15 días antes de la cosecha, y se suelen mezclar en el agua de riego con carbohidratos (azúcares) para
potenciar sus propiedades. Aquí podemos comprar abonos de floración
Boosters
Una vez que los cogollos ya han adquirido cierta forma durante el período de floración, es interesante aumentar su tamaño. Esto se consigue mediante el uso de productos engordadores o boosters.
Se emplean cuando la planta ya no está sacando ningún cáliz nuevo y los cogollos ya están formados y repletos de pelos blancos, algunos incluso tirando ya a ese característico color parecido al ámbar. Además, hay que utilizarlos con mucha mesura porque el propósito es el de potenciar el sabor de la futura cosecha, no el de engordar el cogollo en detrimento de su calidad natural.
En el mercado encontrarás estimuladores o engordadores de varias categorías, algunos de origen 100% biológicos (los más recomendables si lo que más te preocupa es el sabor final) y otros mezclados con productos químicos (que no vienen mal si quieres un equilibrio entre tamaño y sabor). Aquí se puede comprar el Bio Boost de Canna
Enzimas
Las hemos dejado para el último lugar, pero lo cierto es que serán tus aliadas durante todo el proceso de cultivo. Es recomendable que las utilices de manera regular (cada 10 días aproximadamente, o en función de las necesidades de tu planta) para mantener la marihuana limpia y garantizar así su calidad y su sabor.
Las enzimas son proteínas que se disuelven en el agua eliminando los nutrientes que la raíz no ha absorbido, favoreciendo a la descomposición de todas las sustancias muertas en la tierra de cultivo y estimulando la microvida en tus macetas para que el uso de fertilizantes químicos no termine pasándote factura de un modo negativo.
