No puede dudarse que para comprar productos de consumo los mercados tienen un punto de romanticismo y conexión con la ‘tierra’ tremendamente atractivo. Desde Camden Town al madrileño mercado de Motores, en todo el mundo se apuesta por estos espacios como una manera alternativa de comprar y vender bienes de manera ajena a las grandes corporaciones. Todos, en más de una ocasión, nos hemos dejado atrapar por la sensación de recorrer puestos, oler nuevas esencias, tocar, palpar, sentir productos o regatear con comerciantes. Recientemente, en Los Ángeles (California), ha tenido lugar una original iniciativa de este tipo pero que, en este caso, más que en torno a la artesanía, los productos de la huerta o la ropa de segunda mano giraba en torno a la marihuana biológica.
En efecto, la marihuana fue la protagonista del Heritage Farmers Market, que se ha celebrado en la soleada ciudad con un tremendo éxito de público. Desde particulares interesados en todo lo relacionado con el cultivo de marihuana biológica a curiosos atraídos por diferentes productos elaborados de, por y para la marihuana (dulces, herramientas, abonos, sustratos, fertilizantes, antiplagas…) han sido miles las personas atraídas por este particular ‘reclamo verde’, un reclamo que, sin duda, muestra la manera en la que la sociedad está despertando o, al menos, cambiando su manera de percibir todo lo relacionado con el mundo del cannabis.
En la variedad está el gusto
Y es que en este mercado los usuarios han podido dar un paseo para encontrar desde lubricantes sexuales desarrollados y producidos a partir de marihuana a abonos para el cultivo de cannabis, semillas, productos de repostería o todo tipo de parafernalia. El objetivo, de acuerdo con la organización del Heritage Farmers Market, no sólo era liberar de la estigmatización a la marihuana de cara al gran público sino, además, mostrar las posibilidades comerciales y sostenibles de un sector que mueve más de 40.000 millones de dólares cada año en todo tipo de actividades directa o indirectamente relacionadas.
La situación en torno al cannabis en el estado de California aún es especialmente restrictiva. En este sentido, sólo está permitido el consumo terapéutico de marihuana mediante prescripción médica. La tenencia para consumo propio de más de 28 gramos de cannabis está considerada como un delito penal, perseguido hasta con penas de cárcel. En el caso de los pacientes autorizados para ello, se puede disponer de unos 100 gramos de marihuana con finalidades medicinales.
