Tanto en el apartado recreacional como médico, Colorado se ha convertido en una especie de Shangri-la para los defensores de la legalización universal del cannabis. El uso de la marihuana medicinal y sus beneficios y aplicaciones para el tratamiento de un variado número de enfermedades será objeto de estudio en Colorado. El Gobierno estatal va a conceder 10 millones de dólares a empresas de investigación estatales para que realicen proyectos de análisis y desarrollo de estudios al respecto.
El objetivo de estas investigaciones es, según las autoridades de Colorado, hallar vías para el tratamiento de ciertas enfermedades y dolencias que no responden a las medicinas más “tradicionales” y ortodoxas. Alrededor de 100.000 ciudadanos y votantes registrados del estado de Colorado ya emplean vaporizadores u otros métodos para consumir marihuana con finalidad terapéutica.
Los últimos resultados publicados acerca de la eficacia del cannabis en el tratamiento de males como la epilepsia o el estrés postraumático en excombatientes han hecho que se creen unas considerables expectativas en el sector. Los investigadores, laboratorios y centros a los que se les concedan estas ayudas deben comenzar inmediatamente a poner en marcha sus proyectos y tenerlos finalizados antes del julio del año 2019.
La denominada Ley de Subsidios para Estudios de los Efectos Médicos de la Marihuana no establece, de facto, que estos beneficios existan, sino que, más bien, lo que pretende es establecer un análisis que determine si las ventajas de la aplicación medicinal del cannabis son reales y se pueden explotar y utilizar en beneficio de la comunidad. Se contempla como una opción, especialmente, para pacientes aquejados de enfermedades incapacitantes como la esclerosis múltiple, sin tratamientos “tradicionales” que se hayan probado realmente eficaces y a los que se les vayan agotando las opciones.
Como apuntábamos recientemente en este espacio, una encuesta llevada a cabo por la Universidad de Qunnipiac, mostraba que más de la mitad de los votantes registrados en Colorado (el 52%, en concreto) estimaban que la legalización de la marihuana ha traído grandes beneficios para este estado. Casi idéntico porcentaje de los votantes registrados reconocían haber fumado o fumar en la actualidad marihuana. Los habitantes de Colorado mayores de 21 años pueden cultivar hasta seis plantas de marihuana en un emplazamiento registrado y de uso privado. En enero del presente año se inauguraron los primeros establecimientos legales de venta de cannabis, y sólo durante ese primer mes, dicha actividad generó unos ingresos de dos millones de dólares en impuestos estatales.
