Chocolatinas, paquetes de patatas fritas, refrescos, chicles, preservativos… son muchos los productos que asociamos con las máquinas expendedoras. A partir de ahora puede que la el cannabis o las semillas de marihuana se unan a este grupo. Bueno, puede que no de manera inmediata nos vaya a resultar igual de sencillo sacar de una máquina marihuana que un snack, pero lo cierto es que ya se ha dado un primer paso. Y ha sido en Canadá.
En Efecto, la Sociedad del Dolor en Vancouver es el primer centro en el que se ha procedido a instalar una máquina de vending en la que los usuarios, del mismo modo que en las que podemos ver en cualquier calle de España, pueden meter su dinero para recibir sus bolsas herméticas con la variedad de marihuana seleccionada. La Pain Management Society es una institución que se orienta a la lucha contra el dolor crónico en los pacientes. Portavoces del centro recalcan que el producto que se comercializa a través de este equipo, el primero de su clase, es de primera calidad, cultivado, producido y sellado de manera 100% profesional.
En Canadá se estima que hay algo menos de 40.000 ciudadanos autorizados por el Gobierno para adquirir marihuana medicinal, recetada en casos de dolor crónico diagnosticado.
Pese a que el consumo de cannabis en Canadá aún está en una situación de ilegalidad, a lo largo de los últimos años se han dado una serie de pasos orientados a conseguir una mayor normalización. Por ejemplo, como vemos, el uso terapéutico de la marihuana está permitido bajo supervisión y aprobación médica y, asimismo, la legislación permite la posesión para consumo propio de hasta ciertas cantidades.
Recientes encuestas llevadas a cabo por la consultora Forum Research en el país han demostrado que en torno al 70% está a favor de la legalización del consumo de marihuana en el país.
Al calor de los buenos resultados en términos de ingresos que la legalización de la marihuana está dejando en Colorado, muchos han sido los canadienses que se han puesto ya a echar cuentas para saber cuántos ingresos podría proporcionar el dinero “verde” procedente de la fiscalidad de los negocios asociados a la marihuana legal. Para ciertos expertos, la cifra podría situarse en el entorno de los 108 millones de euros anuales, si la marihuana se legalizase en todo el país, con un modelo similar al adoptado en Colorado desde principios del presente año.
